Delirios revolucionarios
Delirios revolucionarios
En un mundo de razones relativas impulsar una idea ha dado pie a debates y hasta inexplicables guerras. En “Los Justos” (1950) del francés Albert Camus (1913–1960) una singular pugna ideológica despierta algo más que recelos y cismas. El inspirado montaje de Soma Teatro sobre esta pieza lo evidencia.
Bajo la dirección de Rodrigo Chávez y una pertinente versión de Daniel Amaru Silva, la puesta reluce por su sobriedad estética y rigor histórico. Tras sintetizar los cinco actos originales en dos sólidas partes, los realizadores transitan por desbordes racionales e irracionales de una revolución.
Para entenderlo “Los Justos” recurre a un hecho real: el asesinato del Gran Duque Sergio Romanov en 1905. Sus protagonistas –un grupo de revolucionarios que planea un atentado– sitúan al espectador en un dilema complejo. Uno que involucrará pasiones y razones en torno a un delicado escenario.
“Lcos” idealistas
En la obra, estos personajes luchan contra el régimen zarista portando una bandera de cambio que, a veces, obnubila sus actos. Stefán (Renato Rueda, enérgico y contundente) enarbola esta lucha sin dudas, mientras que en Iván (impecable y entregado Fernando Luque) brilla la ilusión de un libertario y comprometido soñador.
Ambos, en contrapeso perfecto, mantienen en jaque el futuro de la Revolución Rusa. Esta dicotomía –salpicada de escrúpulos, contradicciones y códigos de honor– dará coherencia al pensamiento de todo el grupo. La “pugna” ideológica de Rueda y Luque funciona junto a un elenco que confabula acertadamente.
El líder Boria (aceptable Gonzalo Molina) se esmera por mantener la armonía del comando que integra la experta en detonantes Dora y Alexis (Andrea Fernández y Gabriel González de buenos papeles). Fernández y González tendrán decisivos y conmovedores roles posteriormente como La Gran Duquesa y el verdugo Foka.
Sutil conspiración
Como en otras puestas de Soma Teatro, el diseño escenográfico (mérito de Coco Luyo) es pulcro. Las intervenciones están marcadas acertadamente dentro y fuera de un cuadrilátero delineado en el primer acto y sobre un pequeño estrado en el segundo. Nada interrumpe la acción ni distrae la presencia de los actores a media luz.
En su desenlace, la encrucijada inicial se intensifica: ¿puede un ideal justificar medios tan valiosos como la vida? ¿Hacen falta nuevos mártires? Sutilmente Camus no intenta definir la lógica radicalista, aunque sí cuestionarla estrategia sectaria y obtusa con que se hace frente al sistema.
“Los Justos” es una protesta sobre las arbitrariedades y riesgos de aplicar una idea usando métodos precipitados y efectistas por más que los fines parezcan altruistas. Por desgracia el precio de la convicción suele costar un futuro no estrenado por una juventud apasionada.
Ficha técnica
“Los Justos” de Albert Camus
Versión: Daniel Amaru Silva
Dirección: Rodrigo Chávez / Asistencia: Daniel Cano
Elenco: Fernando Luque, Andrea Fernández, Gonzalo Molina, Renato Rueda y Gabriel González
Escenografía: Coco Luyo
Vestuario: Lizzy Castillo
Musicalización: Allison Palma y Arturo Chávez
Lugar: Teatro de la Alianza Francesa (Av. Arequipa 4595, Miraflores)
La temporada va hasta el 10 de julio
Funciones: Viernes y sábado a las 8pm / Domingo a las 7pm
Entradas: S/. 35 (General)y S/.25 (Estudiantes y jubilados)
Una producción de Soma Teatro, Alianza Francesa y Centro Cultural PUCP