Cecilia Reynoso Rendón

Artículos del autor

  • Algo en esa publicidad no me gustaba: no estaba segura si era la idea de que alguien había cometido un delito o que esa chica terminara pidiendo el teléfono de ese delincuente, solo por el jean que usaba. Esa sensación de fastidio se repetiría en varias oportunidades frente a comerciales de televisión o radio, sin que me detuviera a meditar mucho sobre ello. La chica que sube a la mesa para reemplazar a una cerveza y que luego es reemplazada por otra “litro 100”, o el panel de la carretera con una señal de tránsito pegada en una mujer con la frase “curvas peligrosas”, o aquélla en la que una adolescente era colocada...